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Admitámoslo: contratar profesionales puede dar dolor de cabeza. Encontrar el mejor talento disponible es tan difícil como necesario… Y cuando se necesita contratar por volumen, pocos equipos internos de Recursos Humanos tienen el tamaño y el conocimiento especializado del sector para asumir esta tarea.
En estos casos toma relevancia un enfoque más ágil, que les permita a las empresas activar y desactivar la contratación según evolucionen sus necesidades. Una de estas soluciones es la externalización del proceso de contratación (en inglés, RPO: Recruitment Process Outsourcing). De esta manera, un proveedor externo asume todas o algunas de las funciones de contratación permanente de una organización.
En este tipo de servicio, el proveedor gestiona la contratación integrando a los gestores de proyectos y a los reclutadores en la función de RRHH de la empresa. Este equipo utiliza la última tecnología en materia de contratación, desde sistemas de seguimiento de candidatos (ATS, por sus siglas en inglés) y herramientas de gestión de las relaciones con los candidatos, como CRM (Customer Relationship Management) hasta software de búsqueda de personal impulsado por inteligencia artificial y análisis predictivo del talento.
Algunos proveedores de RPO también ayudan a las empresas a reducir su plantilla ofreciendo servicios de transición de carrera a los trabajadores despedidos.
Ningún proveedor confiable ofrece un RPO de talla única. En su lugar, proveedores como PageGroup adaptan sus soluciones a los objetivos y retos específicos de cada empresa.
En términos generales, sin embargo, la mayoría de los RPO se presentan en uno de estos dos tipos:
Una solución integral y continua que abarca todas las funciones relacionadas con la contratación permanente. Para muchas organizaciones, el objetivo final es integrar la contratación global en todas las unidades de negocio.
La implementación de un RPO a gran escala requiere tiempo y una cuidadosa planificación, pero ofrece las mejores eficiencias, ahorros y resultados de contratación a lo largo del tiempo. En un RPO clásico, el proveedor puede:
Incorporar recursos como reclutadores y gestores de proyectos in situ para trabajar con los directores de contratación y los equipos de RRHH
Buscar, seleccionar, entrevistar e incorporar a los candidatos
Preparar y negociar las ofertas de trabajo
Implementar tecnologías de reclutamiento de última generación
Diseñar iniciativas para impulsar la propuesta de valor del empleador (EVP) del cliente
El proyecto a demanda es una solución de RPO de principio a fin con volúmenes y plazos definidos. El proveedor de RPO se integra con una función existente de RRHH o de adquisición de talento para un proyecto específico, como el lanzamiento de un nuevo producto o la apertura de un centro de servicios compartidos.
La mayoría de las características y ventajas de un RPO clásico, como se ha detallado anteriormente, se aplican a un RPO basado en proyectos. La diferencia es un despliegue más rápido de personas y tecnología para ejecutar un proyecto con plazos estrictos.
Un RPO bien diseñado puede transformar los procesos de contratación de una organización en algunas o todas sus unidades de negocio. Los beneficios específicos de RPO incluyen:
Los proveedores de RPO tienen la experiencia y los conocimientos necesarios para optimizar la experiencia del candidato, desde la selección y las entrevistas hasta la incorporación e incluso el asesoramiento sobre la transición de la carrera profesional.
Los directores de contratación y los equipos de RRHH también se benefician. El proveedor de RPO asume las responsabilidades administrativas, liberando a los equipos principales para que desarrollen sus habilidades en otras áreas y se centren en tareas más estratégicas.
Los volúmenes de contratación no son estáticos a lo largo del tiempo. Los proveedores de RPO incorporan flexibilidad en sus soluciones, lo que permite a las organizaciones ampliar o reducir los equipos cuando sea necesario. Esto da a las empresas la confianza para planificar nuevas iniciativas sin preocuparse por la disponibilidad de talento en su mercado.
Los proveedores de RPO se especializan en la creación de reservas de talento y en el desarrollo de proyectos, dándole acceso a las mejores contrataciones permanentes en cualquier mercado. Los expertos en RPO saben cómo atraer a los candidatos pasivos, así como a los mejores talentos de grupos tradicionalmente infrarrepresentados, que pueden aportar la tan necesaria diversidad a la organización.
Los profesionales de RRHH rara vez tienen tiempo para estar al día de los avances en tecnología de contratación. Los proveedores de RPO, en cambio, emplean a especialistas para crear y desplegar las últimas tecnologías, incorporando potentes herramientas como las plataformas VMS y las herramientas de búsqueda de personal basadas en inteligencia artificial.
La legislación laboral no solo es inestable dentro de los mercados, sino que también varía entre ellos. Un proveedor de RPO realiza un seguimiento de todas las normativas y legislaciones pertinentes, garantizando que todas las contrataciones cumplan con las leyes locales.
Uno de los principales objetivos de los RPO es reducir los costos del talento. Al transferir la responsabilidad de la contratación y la gestión de las contrataciones permanentes a un proveedor de RPO, la organización puede esperar conseguir un ahorro significativo.
Dado que los proveedores de RPO son evaluados en función de parámetros como el tiempo de contratación y la calidad de esta, les interesa garantizar que las vacantes permanentes se cubran rápidamente y con los mejores talentos disponibles. De esta forma se minimizan los costos más elevados y la menor productividad asociada a las carencias de mano de obra y competencias a largo plazo.
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